Sin querer, buscando algo hoy con mis hijos, me metí en un viejo canal de YouTube y terminé navegando en recuerdos agridulces; un tanto maltratados, pero esenciales e insustituibles…
Weeee! ¿Vos stremeabas en Twitch? Me dijo Facu (el mas chico) sorprendido ante el ceño fruncido de Santy (el mas grande) ya no tan sorprendido por las cosas…
Y así es que ocurrio este pequeño capitulo de revisionismo historico…
Resulta que había olvidado que hace bastante más de 12 años comenzó Red Misiones. Twitch y el Tsunami de Apps no existían, obvio, nos conformabamos con apenas unos megas de velocidad…
Fue como todo fue siempre y sigue siendo para mí y para mi leal tropa…
Fue artesanal y por pura inconsciencia (me mandé en una picada, chistando a mí mala sombra)…
Solo tenía mi ansiedad, mi desenfreno y el OK de ella…
Un sitio web que sangro hectolitros para poder verse similar a uno de esos canales super alternativos de TV online del primer mundo, que empezaba a descubrir la libertad que proponia “La era de la imagen” que asomaba timidamente a través de Internet…
Era hacer una especie de periodismo “clandestino” con camaras y exclusivamente online, WebTV digamos…
Y por supuesto, finalmente lo fue (Missão dada é missão cumprida, dice el Capitão Nascimento)…
“El futuro llegó hace rato” decia una y otra vez por ese entonces…
Recuerdo que tragaba de a poco mi lengua y les explicaba con paciencia infernal lo que significaba la palabra “Streaming” a quiénes con su habitual ignorancia supina se hacian muecas burlonas entre ellos…
Y también recuerdo a aquellos que a través de sus dientes amarillos y afilados me daban la razón como a un loco; quizás creyendo que yo estaba de remate…
Después todo fue como me suceden las cosas; algo asi como el antónimo de Tranqui 120…
Al final, los días interminables se me pegaron y logre evitar a tiempo ser la confirmación del síndrome de la rana hervida…
Con el tiempo y gracias a las facturas de EMSA y al calor “aprendí a disimular mi estupidez”…
Lo interesante es que a pesar de los aplazos, ahora disfruto de una agradable nostalgia acerca de aquel pionero y demente proyecto…
Pero especialmente acerca de aquel tipo tiernito, lleno de inocencia y energia, que pretendió (ohhh, otra vez) siempre ir un paso adelante y romper la mayor cantidad de las reglas que lo confronten…
Hoy me digo que el futuro ya pasó; hoy hasta un niño entiende de que se trata y hace “Streaming” desde su cama (aunque ellos no crean que ese chaparrito esté loco de remate como el que suscribe)
En fin, duró poco la fantasía, como dice Sabina: “Lo que duran dos peces de hielo en un Whisky On The Rocks” y nada más…
Pero aún así, miro hacia atrás y me veo y me escucho inclaudicable en mi zoncera…
Siempre me veo a mí, siempre yo. Me veo queriendo siempre “mais um”…
Ayer fue una quimera y hoy nada mas se le dice “stremear”; así de elemental mi querido Watson…
Por eso hoy ya se lo dejo a la gurisada y también a los que siempre se dieron cuenta de la risa que me da…
A mí me encontraran (ohhh, otra vez) buscando una nueva contienda…
Así que, aunque esto sea extremadamente random (como casi todo en mí) vale un brindis bien inesperado por Red Misiones y por esa única gran personita que aún sigue creyendo y redactando incansablemente en www.redmisiones.com
“Les contaste un cuento sabiéndolo contar…
Y creyeron que tu alma andaba mal…
La mediocridad para algunos es normal…
La locura es poder ver más allá”…
(Sui Generis)
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